A este trastorno se lo conoce como somnifobia u también conocido como oneirofobia y es mucho más habitual de lo que te puedas llegar a pensar; lo más normal es que ir a la cama sea una experiencia satisfactoria y que nos guste… pero para algunas personas puede llegar a ser algo completamente catastrófico.
Estas personas empiezan a experimentar toda una serie de síntomas antes de irse a dormir que, lógicamente, impedirán que puedan llegar a conciliar el sueño: por ejemplo, pueden experimentar mareos, náuseas, sudoración excesiva, boca seca, palpitaciones… además de que los ataques de pánico son muy habituales.
Realmente no se saben las causas exactas, aunque todo apunta a que podría deberse a pesadillas que no paran de repetirse o a haber experimentado situaciones traumáticas antes de ir a la cama.
En el caso de que se experimente alguno de estos síntomas será de vital importancia ponerse en contacto con un especialista con el objetivo de que pueda iniciar un tratamiento desde el primer momento; de esta forma se podrá tratar a tiempo y el descanso siempre será óptimo.
Ahora ya conoces este miedo tan tedioso y esperamos que nunca te llegue a afectar a ti.