Hoy hablaremos de cuatro majestuosos árboles que se yerguen en nuestro planeta de forma majestuosa y silenciosa. Su crecimiento ha sido imparable y se conocen árboles con más de 4500 años de antigüedad. Auténticas esculturas del reino vegetal y todo un ejemplo de supervivencia. Estos árboles tan antiguos crean escenarios únicos dignos de ver, por lo que te recomiendo que leas con detenimiento todo el artículo.
El Senador (ciprés calvo).
Este árbol de unos 3500 años de antigüedad pertenece a la especie del ciprés calvo y está localizado en tierras de Florida (Estados Unidos). Este árbol ha conseguido mantenerse en pie y hacer frente a varios huracanes que arrasaron con la zona, pero lamentablemente ha sido dañado por un incendio, el cual se cree que ha sido originado por el hombre.
Alerce (fitzroy cupresácea).
Se trata de una especie andina de nombre Fitzroy Cupresácea pero comúnmente llamado Alerce. Este árbol crece en las zonas boscosas de Argentina y Chile de forma muy lenta, siendo el más viejo de más de 3600 años y localizado en suelo chileno.
Sarv-e Abarqu (ciprés).
Otro árbol milenario perteneciente a la especie del ciprés, más concretamente a la especie Zaroastrian Sarv. Este árbol está localizado en Irán en la ciudad de Yartz y tiene más de 4000 años de antigüedad, lo que lo convierte en el árbol más antiguo de todo el continente asiático.
Matusalén (pino).
Es un pino situado en California, en un lugar desconocido para que no sufra agresiones por parte del hombre. Bajo el nombre de Matusalén, encontramos al árbol más antiguo del mundo con más de 4800 años de antigüedad. Existía un árbol de la misma especie que tenía más de 4900 años y se le conocía como Prometeo, pero tristemente, fue talado por el hombre.