Muchos son los que a día de hoy se lanzan a buscar psicofonías a lugares abandonados como grandes mansiones, psiquiátricos, hospitales, incluso lugares arrasados por las guerras donde en su día hubo dolor y destrucción esperando encontrar con ello una grabación que demuestre que hay algo más que nos acompaña, algo que, aunque aterrador suena en el silencio de la soledad.
Una psicofonía propiamente dicha no es más que capturar con un aparato electrónico un sonido que a simple vista no podemos escuchar, un sonido que nuestros oídos son incapaces de percibir.
En este aspecto hay que tener en cuenta que las psicofonías al ser un audio rebotan en el tiempo y en espacio, esto sumado a que nuestros oídos con el paso de los años pierden audición y no son capaces de escuchar los decibelios más bajos puede hacernos creer que estamos escuchando voces del mas allá cuando en realidad ese audio permanecía ahí todo el tiempo.
Una grabadora es capaz de grabar decibelios muy poco sonoros, esto sumado a que después podemos ampliar con facilidad el sonido digitalmente nos da la opción de capturar una psicofonía.
El audio no se destruye, si ahora mismo gritamos un ¡hola! en una habitación vacía, este seguirá sonando durante años en el espacio, aunque nosotros ya no podamos escucharlo, pero sí puede ser capturado por un potente grabador.
Los amantes de lo paranormal han buscado este tipo de sonidos a lo largo de la historia, aferrándose a que los mismos son voces de sus seres queridos intentando transmitirles un mensaje, de este modo cuando acuden a lugares que provocaron mucho dolor esperan encontrar llantos y lamentos. En realidad, aunque si se capturasen voces de dolor y pena, estas voces en su día fueron voces reales como tu ¡hola! en esa habitación, que tras el paso de los años se ha convertido en algo inaudible para nosotros, pero fácil de grabar con una grabadora de pequeña potencia.
Deducir por todo esto que las psicofonías reales no son un engaño si hablamos sobre grabación de sonidos, pero sí podrían llegar a serlo si pretenden creer o pensar que estas grabaciones son fantasmas o voces del más allá que quieren transmitirnos un mensaje, por desgracia la mayoría son un fraude, si nos referimos a sonidos producidos por fantasmas en directo, aunque no siempre es así, en algunos casos si puede existir una energía inteligente capaz de responder a preguntas concretas al instante.
Muchas personas buscan más ganar dinero que el descubrimiento de la verdad y cometen el fraude, haciendo creer muchas veces que ecos del pasado son fantasmas del presente.