Recientemente ha aparecido un impactante estudio que ha sido capaz de alegrar a más de uno. El investigador Dezhong Yao y su equipo han hecho un estudio que demuestra que jugar a videojuego no solo nos entretiene, si no que también es capaz de mejorar nuestra conectividad funcional y también aumenta el volumen de materia gris.
Se atreven a compararlo con la práctica de un deporte real. Al igual que sucede en ellos, para poder practicarlos se necesita un alto nivel de concentración y tener sincronizados perfectamente nuestros pensamientos con la respuesta de nuestras manos.
Gracias a eso, nuevas funciones cognitivas están mucho más desarrolladas que en personas que no juegan a videojuegos.
El estudio ha sido tan revelador que cada vez son más los investigadores que se están interesando en ella para ver a donde realmente es capaz de llegar.
Consistió en la realización de resonancias magnéticas a 27 jugadores profesionales y a 30 amateurs. Los resultados revelaron que sus conexiones cerebrales son más ricas en los hemisferios si se comparan con los del segundo grupo (concretamente en funciones de matemáticas y lógica).
Así que ya sabes, si alguien te dice que jugar a videojuegos no vale para nada, ya tienes este artículo para rebatirlo.